El Cedin es solamente una ilusión
02/07/2012El CEDIN (Certificado de Inversión Inmobiliaria) genera una falsa expectativa de reactivación del mercado inmobiliario.
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El CEDIN (Certificado de Inversión Inmobiliaria) genera una falsa expectativa de reactivación del mercado inmobiliario.
La imparable caída de la actividad del mercado inmobiliario comenzó en octubre de 2011 conjuntamente con las medidas de control sobre el mercado de cambio, particularmente el dólar. Como era previsible, la consecuencia inmediata fue un fuerte alza del dólar paralelo, que casi no existía, y el temor a una eventual devaluación del peso.
Lejos de ser todos economistas, los ciudadanos comunes guardan en su memoria escenarios similares al actual que, invariablemente, han derivado en debacles económicas. Frente a la situación de incertidumbre actual la reacción de quienes tienen dólares es no tocarlos ahora porque, pensando en una eventual devaluación, creen que los precios bajarán. Y quienes están posicionados en ladrillos, los mantienen como resguardo de valor para afrontar ese mismo escenario de devaluación pero sin derrumbe de precios.
Frente a estas posturas tan lógicas: ¿podemos creer que el CEDIN va a generar una reactivación del mercado inmobiliario? Definitivamente debemos decir que no, porque el problema es de confianza y no de mercado, ni se relaciona con las dificultades para acceder a la tenencia de dólares. Hoy mismo, los potenciales compradores tienen los dólares, y aún así, no los usan.
Sin embargo, creemos que el CEDIN podría generar algún movimiento por parte de aquellos que no puedan justificar la tenencia de dólares y que, con este certificado, tendrán la oportunidad de blanquear su situación, aunque sea al costo de pagar un valor por m2 que quienes no necesitan blanquear (el mercado), no convalidan. Pero no podemos pensar que el volumen de operaciones con esa génesis sea tal que permita afirmar que hay una reactivación del mercado.
Pero aparece nuevamente la desconfianza cuando hablamos con propietarios vendedores: todos manifiestan temor a que, al momento de cobrar el CEDIN, no le entreguen dólares. La única forma de viabilizar operaciones que se paguen con CEDIN será que las partes se reúnan en el Banco depositario de los dólares y que el certificado se cobre en simultáneo con la firma de la escritura de venta.
Habrá que esperar a la reglamentación de este instrumento y a que esté disponible como opción de pago. En principio, parece ser un remedio equivocado porque el mal tiene otra raíz. Porque como tantas veces, una receta sencilla y ortodoxa -tan difícil de conseguir- (eliminación de la brecha del dólar oficial y el paralelo, control de la inflación que permita despejar las expectativas devaluatorias) es lo único que el mercado necesita.
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